Aleación de níquel 625 frente a Inconel 625

Tanto la aleación de níquel 625 como el inconel 625 pueden ofrecer una excelente resistencia y resistencia a la corrosión en temperaturas extremas. Pero, ¿cómo distinguir uno con otro? Veamos las diferencias clave entre la aleación de níquel 625 y el Inconel 625.

Composición química:

Níquel Cromo Manganeso Hierro Molibdeno Niobio Silicio

Aleación de níquel 625 58 % 22 % 9 % 5 % 3 % 1,5 % 0,5 %

Inconel 625 58 % 20 – 23 % 5–6,5 % 8–10 % 3–5 % 1–3 % 0,4–0,7 %

De la hoja, podemos saber que ambas aleaciones tienen composiciones similares en general, sin embargo, existen ligeras variaciones en las cantidades de ciertos elementos presentes en cada uno que se desempeñarán de manera diferente en las aplicaciones.

Resistencia al calor:

La resistencia al calor es un factor importante al comparar Nickel Alloy 625 e Inconel 625. Nickel Alloy 625 puede soportar temperaturas de hasta 1400 °C (2550 °F), mientras que Inconel 625 puede resistir temperaturas de hasta 1500 °C (2730 °F). Esto hace que Inconel 625 sea un poco más adecuado para aplicaciones que requieren una mayor resistencia al calor.

Resistencia a la corrosión:

En cuanto a la resistencia a la corrosión, tanto la aleación de níquel 625 como el Inconel 625 pueden funcionar de forma excelente en entornos hostiles (agua de mar o productos químicos ácidos). Pero cuando se expone a ácidos reductores como el ácido clorhídrico o el ácido sulfúrico, el Inconel 625 es mejor que la aleación de níquel 625 debido a sus niveles ligeramente más altos de niobio, lo que le brinda protección adicional contra la corrosión por picadura causada por este tipo de ácidos.

Conclusión:

En una palabra, elegir entre los dos dependerá de sus necesidades específicas, incluidas las restricciones presupuestarias, el nivel deseado de resistencia al calor y el nivel esperado de protección contra la corrosión necesaria para una aplicación en particular.