El proceso de inspección de calidad de los tubos sin costura de acero inoxidable implica una serie de siete pasos críticos.
Prevención de la carburación durante el calentamiento:
Al calentar tubos sin costura de acero inoxidable, cualquier aceite en la superficie puede provocar variaciones en la cascarilla de óxido, lo que lleva a la carburación. Las áreas carburadas en el material base debajo de la cascarilla de óxido serán más propensas a la corrosión ácida. Este problema puede verse agravado por las gotas de aceite de los quemadores de aceite pesado durante la combustión inicial. Para evitar esto, los operadores deben evitar el contacto directo con los tubos con las manos y asegurarse de que el aceite fresco no entre en contacto con el acero.
Desengrasado completo antes del procesamiento en frío:
Si hay aceite lubricante presente en la superficie durante el procesamiento en frío, debe eliminarse completamente utilizando agentes desengrasantes de tricloroetileno y soluciones de soda cáustica. Después del desengrasado, los tubos deben enjuagarse con agua tibia y luego someterse a un tratamiento térmico para garantizar que el aceite residual no afecte la calidad.
Eliminación de impurezas superficiales:
Cualquier impureza, en particular materia orgánica o ceniza, en la superficie de las tuberías puede influir en la formación de incrustaciones de óxido durante el calentamiento. Asegurarse de que la superficie esté limpia antes del calentamiento es esencial para mantener una calidad constante.
Asegurar una atmósfera uniforme en el horno:
Las variaciones en la atmósfera del horno pueden provocar una formación irregular de incrustaciones de óxido, lo que da como resultado superficies irregulares después del decapado. Para lograr resultados uniformes, la atmósfera en todas las áreas del horno debe ser uniforme durante el proceso de calentamiento.
Uso de materiales de contacto completamente secos:
Los objetos que entran en contacto directo con las tuberías calentadas deben estar completamente secos. Si estos objetos se almacenan a temperatura ambiente después del secado, pueden absorber humedad, especialmente en entornos con mucha humedad. Para evitarlo, es mejor secar los materiales inmediatamente antes de su uso.
Cómo abordar las incrustaciones de óxido residuales:
Cualquier incrustación de óxido residual de procesos anteriores puede provocar diferencias en el grosor y la composición de las incrustaciones después del calentamiento, lo que da como resultado superficies irregulares después del decapado. Es fundamental prestar mucha atención no solo al tratamiento térmico final, sino también a los tratamientos térmicos intermedios y a los pasos de decapado para evitar este problema.
Cómo evitar el contacto directo con la llama:
La formación de incrustaciones de óxido puede variar si las tuberías se exponen directamente a la llama durante el calentamiento. Para evitar una oxidación desigual, es importante evitar el contacto directo entre las tuberías y la llama.
Estos pasos están diseñados para garantizar la calidad constante de las tuberías de acero inoxidable sin costura al evitar defectos relacionados con la carburación, la formación de incrustaciones de óxido y las impurezas superficiales.